Plantación de un viñedo

Aunque actualmente son pocos los agricultores que no conozcan estas actividades, existiendo además en la mayoría de pueblos vitícolas, especialistas dedicados a estas labores, hacemos un pequeño resumen de los principales trabajos a seguir en la plantación de un viñedo:

Análisis de los suelos


El análisis debe contener los siguientes parámetros:

ANÁLISIS FÍSICO-QUÍMICO: Textura, materia orgánica, nitrógeno, fósforo, potasio, carbonatos totales, caliza activa, conductividad eléctrica, etc.

ANÁLISIS BIOLÓGICOS: Nemátodos.

ANÁLISIS DEL AGUA: En viñedos donde se puedan realizar riegos de apoyo, conviene realizar un análisis del agua, especialmente para determinar su salinidad.

 

Preparación del terreno


DESFONDE: Evitando el afloramiento de calizas que suelen aparecer en muchos subsuelos o que supongan una disminución de la fertilidad del suelo. En estas circunstancias debe emplearse el subsolador.

DESPEDREGADO: En los casos que sea necesario.

ESTERCOLADO: En función de los análisis del suelo.

LABORES SUPERFICIALES: tres o cuatro pasadas con cultivador y grada para que quede mullido y llano el terreno.

DESINFECCIÓN DEL SUELO: En caso que se detecten problemas de nemátodos, casi siempre ligados a suelos que recientemente hayan albergado viñedos. de producirse esta desinfección debe realizarse de 3 a 4 meses antes a la plantación, puesto que los gases perjudican a la planta.
En vísperas de la plantación, dar una pasada de atabladora para allanar y asegurar el refinado del terreno, con lo cual se facilitara el trabajo de marqueo y plantación.

 

Diseño de la plantación


ORIENTACIÓN: Una plantación en espaldera condiciona el régimen lumínico de las plantas, por lo que hay que tener en cuenta que la máxima eficacia lumínica se obtiene con una orientación noroeste-sudeste.

DENSIDAD DE PLANTACIÓN: La productividad de la parcela dependerá de la densidad de plantas por hectárea. En secanos áridos y pobres no conviene pasar de las 1.500 plantas por hectárea. En tierras fértiles y con posibilidad de riego, la densidad puede aumentar hasta 3.000 plantas por hectárea. Se debe procurar un equilibrio vegetativo, para obtener cosechas adecuadas y de calidad.

MARCO DE PLANTACIÓN: En plantaciones en espaldera, la necesidad de paso de maquinaria aconseja calles de un mínimo de 3 metros, variando la distancia entre cepas dentro de la fila en función de la densidad de plantación elegida.
Ver cuadro adjunto.

 

Material vegetal


El portainjerto o patrón se elegirá basándose en las características del terreno, de acuerdo con los resultados del los análisis de suelo realizados, según el sistema de cultivo previsto.

En la elección de las variedades viníferas, deberán tenerse en cuenta las restricciones de cada comunidad autónoma.

 

Preparación de la planta


Las plantas injertadas se podan dejando dos yemas, se limpian de raíces intermedias y en cuanto a las de la base, pueden dejarse unos 5 cm. de longitud aproximadamente.

Normalmente la mercancía se expide con estos trabajos efectuados, incluso se parafina para la mejor conservación y se encaja; por consiguiente, la planta se suministra totalmente preparada. La misión del viticultor, es colocar las cajas en un local cerrado y fresco, sin abrirlas, y a medida que se vayan plantado ir sacándolas de las cajas.

 

Plantación


Como se indica en uno de los párrafos anteriores, es imprescindible que el terreno se halle bien preparado, con un tempero adecuado y sobre todo asegurar un perfecto contacto entre las raíces y el suelo, procurando pisotear alrededor del tallo, para que la tierra quede lo mas compacta posible.

La soldadura debe situarse al mismo nivel de la superficie, por lo que el brote quedará entre 3 o 4 centímetros por encima del terreno.
Ver cuado adjunto.

No se debe prescindir de cubrir la planta con dos o tres centímetros de tierra sobre la misma, aporcado o mortero. Demasiada tierra dificultaría aflorar o que salga a la superficie el nuevo brote, sobre todo en tierras fuertes o compactas. Otra solución es utilizar tubos protectores de acuerdo con los consejos del fabricante.

 

Cuidados posteriores


Se reducen a facilitar la salida de los brotes, cuando ello sea necesario, mediante descostrados a mano, de la parte alta de los aporcados, así como realizar las labores correspondientes con arado.

La utilización de tutores, así como la realización de operaciones en verde, permitirán conseguir una formación adecuada.

  • Clasificación de las tierras

  • Calidad del agua de riego

  • Marco de plantación

  • Características portainjertos

  • Plantación tradicional

  • Plantación con tubo protector

  • Viñedo en espaldera

  • Marcación del terreno